Olé por este hospital.

[Estiblanca]

Me parece un gran paso para que se nombre y se respete la competencia de la comadrona. Es curioso, pero en todo momento leyendo el artículo, la sensación que me da es que lo que les duele al equipo de ginecólogos es "perder poder"... ¿Acaso no se podría llamar de otra manera? ¿Porqué no confían ni ellos ni la sociedad en un colectivo profesional que está concretamente preparado para ese cometido? O quizá sea verdad que ahora ya no estamos preparadas para ese cometido porque ya no somos comadronas, sino enfermeras obstétrico-ginecológicas a las órdenes de los médicos de tal servicio, sin criterio, porque todo está protocolizado... Me gusta pensar que esto no es así, y este hecho en el Carlos Haya me lo demuestra y me da esperanzas...

No se trata de darnos poder, se trata de concedernos las competencias para realizar con criterio (nuestro criterio, no el de un protocolo elaborado por ellos) nuestro trabajo, y derivar cuando sea necesario. Lo mismo que ellos tienen su criterio para trabajar en sus competencias, nosotr@s también tenemos unos criterios, no menos científicos e igualmente válidos para trabajar en las nuestras (y creo que la atención al parto normal siempre ha sido nuestra, no?)

"Fuentes médicas dijeron que la presencia de un ginecólogo en el paritorio es un elemento que ofrece seguridad y tranquilidad a las embarazadas y sus familias." Está claro que esto es lo que vende, y en muchas ocasiones una realidad, porque es la figura médica de la que se habla en la sociedad, no de matronas ni enfermeras. Si la población supiese qué es una comadrona y cuáles son sus competencias, desde luego, creo que para parir se sentirían más seguras con una comadrona que con un médico o ginecólogo (partiendo de la base de parto normal o de bajo riesgo). Aunque la seguridad muchas veces depende de la persona que te atiende y no de si es ginecólogo o matrona...

No me enrollo más... es que me toca la fibra...